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domingo, 5 de febrero de 2012

UN CLAMOR DE LIBERACIÓN

Muy impotente me siento y desalentado porque todavía no veo que despierte el pueblo de Dios. Debatía con un hermano y estuvimos debatiendo hasta la una de la madrugada y no llegamos a ningún acuerdo. Discutíamos acerca de la condición de la iglesia evangélica por la negativa de ésta a corregir las áreas en que voluntariamente está errada. El tema que más discutimos fue el del diezmo de Dios y sus destinatarios. Yo le decía: Tú condenas a los católicos porque a pesar de lo escrito en Éxodo 20: 4 y 5 ellos quebrantan el mandamiento de Dios. Muy conscientes de lo que están haciendo; pero minimizas la infracción del evangélico.
El evangélico igual que el católico, muy consciente de lo que está escrito en Deuteronomio  14:22 al 29 quebranta el mandamiento de Dios y dice que no está mal ante los ojos de Dios. 

Indiscutiblemente hay pueblo tuyo en esta tierra oh Jehová. !Arrebata oh Señor a tu pueblo de las fauces de estos lobos.

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