UNA CARACTERÍSTICA DE SER HIJO DE DIOS

Santo Domingo, República Dominicana. 18 de Febrero de 2016

"Yo reprendo y castigo a todos los que amo; se pues, celoso, y arrepiéntete. Apocalipsis 3:19 "Porque el Señor al que ama disciplina, y azota a todo al que recibe por hijo. Si soportas la disciplina, Dios os trata como a hijos." Hebreos 12:6-7

¿Por qué algunos cristianos reciben el azote de Jehová al instante de cometer pecados y otros pecan y pecan "impunemente"?

Respuesta: Aquel a quien Dios disciplina instantáneamente es hijo legítimo. Aquel que "prospera" en su maldad es un desconocido de Jehová.

No, no no. No me vengas con que aquí yo estoy adivinando como el profeta Telodije, quien dice: "Mañana serás rico. Mañana seguirás pobre." Si al amanecer eres rico, el te dice: Te lo dije. Si sigues siendo pobre te dice: Te lo dije. Con este tipo de profecía imposible es no acertar. Así es que profetizan los profetas de HORÓSCOPOS.

El secreto no existe; solamente que hay cosas que circulan libremente de bobo en boca, y otras, aunque conocidas por toda la humanidad, no existe ser humano que las pronuncie; ni siquiera se atreve alguien a pensarlas. Porque el secreto se publica o no, dependiendo de quién esté implicado.

Digo esto porque nuestras obras son el documento de identificación personal espiritual. No tenemos que decir quienes somos porque nuestros documentos dicen quienes somos.

Quiero que analicen una expresión que muchos utilizan hoy porque la quiero comparar con un texto bíblico que habla sobre otra expresión que se decía en el tiempo de los profetas. La expresión que hoy se utiliza es:

"Por eso es que yo no creo en evangélicos. ¡Mira las obras de fulano, ese impiazo!

Y el texto bíblico dice:

"Mas por cuanto por este asunto hiciste blasfemar a los enemigos de Jehová... 2-Samuel  12:14

La expresión de los tiempos de los profetas sería: "Hiciste blasfemar el nombre de Jehová."

Cuando comparamos estos dos casos, vemos a dos hombres por culpa de quienes el nombre de Dios es blasfemado; pero uno es hijo del diablo aunque se identifica como hijo de Dios (el evangélico impío), pero por el otro, el mismo Dios ha cortado miles de vidas, y el mismo Dios ha dicho, este es hijo mío (el rey David).

Cuando hablé de que no hay secretos, es que no hay secretos. Aquí nos conocemos todos. Los hijos del diablo saben quienes son hijos del diablo como ellos y quienes somos hijos de Dios. De igual manera, los hijos de Dios sabemos quienes somos hijos de Dios y quienes son hijos del diablo, quienes blasfeman el nombre de Dios.

Así que si eras de los pocos quienes no sabían la razón por la que un hijo del diablo identificado como hijo de Dios "prospera", ya lo sabes; Dios no lo conoce y Dios no lo disciplina.

Pero de igual manera debes haber notado como Dios disciplina a uno a quien tú conoces por sus obras que es un hijo de Dios.

Reitero, todos nos conocemos.

Pero los desconocidos que quieran que Dios los conozca, deben estar dispuestos a recibir la disciplina de Dios y caminar por la senda estrecha, tal como lo hizo Saulo, luego el Apóstol Pablo, a quien se le enseñó que el sufrimiento por la causa de Cristo es insalvable.