SD. Rep. Dom. 31 de Agosto 2017
Hunor Agrio. ¡Tontín, deja que ese muchacho se raspe las rodillas para que aprenda a montar bicicleta. Así fue que yo aprendí!
Tontín ¿Me estás diciendo la verdad? ¿Es así como mi hijo aprenderá a montar bicicleta?
H.A. Claro que sí.
(Media hora después)
H.A. ¿Tontín, que le pasó a tu hijo que lo veo con un codo enyesado?
T. Lo solté en la bicicleta; se cayó y se fracturó el codo.
H.A. ¡No te preocupes! Eso es para crecer.
T. ¿Cómo puedes decir eso? Si no me hubiese llevado de ti, habría esperado hasta que mi niño dominara mejor su equilibrio en la bicicleta.
H.A. ¡Tonmín, no me vengas con pendejadas. ¿Si yo te digo que te tires del puente, tú te tiras?
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Para proteger a tus hijos confía en Jehová, ponlos en sus manos. Ese es el primer paso y el principal. Luego, jamás bajes la guardia!
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