MI ACTITUD

 Santo Domingo, República Dominicana

Jugué basket más o menos organizando hasta mi último año de la liga juvenil; si no me equivoco, es hasta los 18 o 19 años. No recuerdo bien. Pero recuerdo que cuando tenía 17 años, yo no podía tocar con las puntas de mis dedos un aro a 10 pies de altura. Cuando cumplí los 18 años, hacía unos donqueos algo potentes. Alguien me dijo que un enano de 5 pies 10 pulgadas no podía donquear. I proved them wrong.

Mi determination la trasladé al ámbito espiritual en Cristo. Pero no solamente mi determinación sino que también trasladé mi actitud. Ataco en el mejor momento, y asegurándome de que mi energía sea aprovechada al máximo, optimizando mis movimientos. No estoy hablando de basket, estoy hablando de mi filosofía en Cristo. Porque hice mío lo que Samuel le dijo a Saúl (1 Samuel 10:7). Así que no aplico mi obstinación al punto fuerte del enemigo, sino a todos sus puntos débiles.