Santo Domingo, República Dominicana
Miércoles 21 de junio de 2023
[UNIDAD]
[SE SECAN HIGUERAS]
|||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||
El silencio casi absoluto permitía que el sonido de la cristalina corriente del arrollo se pudiera percibir. A la distancia, uno que otro chirriar de lo que creo eran diferentes aves, música de la foresta, llenaban de paz mi alma. ¡Cuanto deseé ser un experto en cantos de aves para poder identificarlas! Sentado sobre la grama, terminé de recostarme boca arriba, con mis manos en la nuca. El golpe de vista fue impactante; un azul glorioso tocado por el dedo de Jehová pintaba el cielo, y tres o cuatro nubes de algodón que paseaban sin prisa, como renuentes a querer abandonar ese lugar. Me dije a mí mismo, « No soy el único que no quiere moverse de aquí.»
Lo anterior es ficción. Sin embargo he tenido muchas experiencias similares. Me resulta difícil de creer que este planeta tan hermoso será destruído. Pero me consuela la promesa de aquel quien creó éste. Él prometió La Nueva Jerusalén. Él no miente y ha dicho que emociones jamás experimentadas por el hombre son las que tienen reservadas para nosotros. Allá, Cristo me tiene un lugar.
Hay gente que tiene problemas con la palabra EMOCIÓN. Pero el genetista de genetistas... ¿Qué digo genetista? El creador de los códigos en nuestros genes fue quien puso éso ahí. Él quiere que nos emocionemos con su gloria. Ésa es emoción santa!
ResponderEliminarDavid le dijo a Mical, «Yo no danzo para ti, yo danzo para Jehová, yo me emociono para Jehová, no para ti.»
ResponderEliminar