Santo Domingo, República Dominicana. 22 de Agosto del 2014
¿Qué pasó? ¿Acaso inventaron la máquina del tiempo, me pusieron en ella y me trajeron al futuro? Digo esto porque ayer yo tenía 13 años y me bañaba en la playa de Güibia, y ahora noto que tengo 44 años. Esta mañana envié a mis hijos a la escuela y ese recuerdo no lo percibo como un recuerdo más fresco que aquellos de mi niñez. Los percibo exactamente como si todo sucedió ayer.
Breve vida, pero intensa. Metida de patas, han sido muy muy muy pocas. Me siento bien. Cuando caminé sin luz Dios me guardó. No tengo remordimientos, gloria a Dios por la paz que esto me da.
Tengo 24 años de edad, en la luz, del lado de la sabiduría, que no tiene nada que ver con la inteligencia. En Cristo confío. Hace 24 años que estoy muerto, y son los primeros años de mi eternidad. Mi existencia es Jesús.
¿Has cometido muchos errores en tu vida, errores pegados a ti como las patas de pavo real que empañan el fulgor del brillo de todo tu éxito? Sonríes y tu corazón llora. Eso es triste. Pero sabes que todos te envidian. Eso es un sedante para ti, pero luego oyes palabras como estas que te desnudan por completo y sientes el terrible frío, el congelador frío de la verdad. Dios te conoce.
Quieres sentir la paz de Dios alejado de Él. ¿Cuándo habitará una pizca de sabiduría en tu corazón?
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