El alma de un hombre es fecundada con la palabra viva del Señor y da a luz un nuevo nacimiento. Este hombre quien ha nacido de nuevo y ha nacido del Espíritu es un bebé, pero crecerá. Al crecer se le entregan dos, o tres, o cuatro, o cinco talentos, dinero que debe invertir para devolverlo a su Señor con los intereses.
La serpiente antigua envía millares de demonios con la encomienda de distraer al siervo de Dios de la misión que él y Dios saben que él debe cumplir. La encomienda de estos demonios es desesperar al siervo de Dios cuando debe estar quieto y esperar luz verde de Dios, o distraerlo de la misión que el siervo ya sabe que debe realizar. Los demonios como primera táctica utilizan los somníferos para aletargar al siervo de Dios, pero estos demonios se encuentran con algunos siervos hiperactivos a quienes no pueden dormir, es cuando la opción es la distracción.
Pero todo esto no debe atemorizar al siervo de Dios, porque el siervo de Dios sabe que Cristo venció, y si Él venció, nosotros también venceremos en su nombre.
¡No distracción! ¿Ya está definido tu lugar en el cuerpo de Cristo? Eso nadie lo sabe excepto tú y Dios y nadie más. ¡No te dejes distraer del profeta viejo porque sabes que el león y tú serán encontrados muertos en el camino si te dejas distraer por la serpiente antigua, el profeta viejo. Yo mismo me estimulo a estar alerta con estas palabras.
¡Oremos continuamente sin descanso! ¡No distracción, no distracción, no distracción!
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