ALABANZA POR LA BONDAD Y EL PODER DE DIOS

Santo Domingo, República Dominicana. 08-Septiembre-2012

Te exaltaré mi Dios mi Rey, y bendeciré tu nombre eternamente y para siempre. Cada día te bendeciré y alabaré tu nombre eternamente y para siempre. Grande es Jehová, y digno de suprema alabanza; y su grandeza es inescrutable. Generación a generación celebrará tus obras. Y anunciará tus poderosos hechos. En la hermosura de la gloria de tu magnificencia y en tus hechos maravillosos meditaré.

Del poder de tus hechos estupendos hablarán los hombres, y yo publicaré tu grandeza. Proclamarán la memoria de tu inmensa bondad, y cantarán tu justicia. Clemente y misericordioso es Jehová. Lento para la ira, y grande en misericordia. Bueno es Jehová para con todos, y sus misericordias sobre todas sus obras. Te alaben oh Jehová todas tus obras, y tus santos te bendigan. La gloria de tu reino digan, y hablen de tu poder, para hacer saber a los hijos de los hombres sus poderosos hechos, y la gloria de la magnificencia de su reino.

Tu reino es reino de todos los siglos y tu señorío en todas las generaciones. Sostiene Jehová a todos los que caen, y levanta a todos los OPRIMIDOS. Los ojos de todos esperan en ti, y tú les das su comida a su tiempo. Abres tu mano, y colmas de bendiciones a todo ser viviente. (Aunque algunos dicen ser dueños de lo que es de todos).

Justo es Jehová en todos sus caminos, y misericordioso en todas sus obras. Cercano está Jehová a todos los que le invocan, a los que le invocan de veras. Cumplirá el deseo de los que le temen; oirá asimismo el clamor de ellos y los salvará. Jehová guardará a todos los que le aman; mas destruirá a todos los impíos.

La alabanza de Jehová proclamará mi boca; y todos bendigan su santo nombre eternamente y para siempre.

Lo que acabas de leer es el Salmo 145. Salmo de alabanza, de la autoría de David siervo de Dios.

¿QUÉ ES UN OPRIMIDO? Uno que recibe opresión por causa de la justicia, por lo que queda fuera en el sentido bíblico, aquel cuya aflicción es la consecuencia del juicio de Dios por sus abominaciones. A este tipo de oprimido abominable es a quien Dios le dice: “Aunque multipliques la oración, no oiré.” (Isaías 1:15).

Pero para llegar a ser un oprimido abominable, debe primero agotarse la paciencia de Dios y eso no es tan fácil de lograr, porque aunque Dios ha dicho que no te oirá: ¡Humíllate sumiso mientras respiras! Porque su misericordia casi no tiene límites.