Los profetas exponían la palabra de Dios en algunas ocasiones en un lenguaje claro y comprensible para todo el mundo, pero en otras ocasiones hacían la exposición en parábolas. Un ejemplo de lo que ahora decimos lo es la palabra FORNICACIÓN, la cual en muchas parábolas de los profetas lleva el significado de idolatría, como es el caso en Ezequiel 16:15. Cuando la palabra habla de infidelidad de Jerusalén como si estuviera hablando de una mujer, en realidad se está refiriendo a la idolatría que Jerusalén practicaba adorando a cualquier ídolo (pseudo-dios) o imagen, en vez de adorar a Jehová, el único Dios verdadero.
Reiteramos, la palabra fornicación, muy utilizada en la Biblia, suele tener el significado de idolatría. Y la idolatría es el pecado que consiste en adorar o reconocer como Dios a cualquier otra entidad o ser que no sea Jehová. Los pueblos de alrededor de Israel tenían cada uno su propio dios. Y Jehová les advirtió que no se contaminasen adorando los dioses de los pueblos de alrededor. Pero Israel no prestó atención a la voz de Jehová e idolatró, es decir, fornicó con ídolos.
A los que están comenzado a leer la Biblia, esta información les resullta de gran utilidad para comprender mejor los mensajes en parábola de los profetas, en especial: Ezequiel, Oseas, Isaías, Jeremías, y otros. Veamos este ejemplo:
"Pero confiaste en tu hermosura y te prostituiste a causa de tu nombre, y derramaste tus FORNICACIONES a cuantos pasaron, suya eras" (Ezequiel 16:15)."
Aquí Dios está reclamando al pueblo de Israel lo mal agradecidos que fueron, porque un grupito de personas eran, 70 personas, (Génesis 46:26-27), cuando entraron a Egipto y dios los convirtió en todo un pueblo. Y luego de darles libertad de los Egipcios con mano poderosa, menospreciaron a Dios, postrándose ante otras cosas inanimadas. A esto es a lo que el profeta se refiere cuando habla de fornicación en Ezequiel 16:15.
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