Translate

miércoles, 18 de julio de 2012

¿QUÉ HOMBRE ES ESTE, QUE AUN LOS VIENTOS Y EL MAR LE OBEDECEN

Santo Domingo, República Dominicana. 18-Julio-2012

Yo admiro a Dios por todos sus atributos, y uno de estos es la incomparable paciencia de Dios. Observe con detenimiento esta situación. Los discípulos ya habían visto los prodigios de los que era capaz el Señor, y a pesar de eso decir:
¿Qué hombre es este, que aun los vientos y el mar le obedecen? (Mateo 8:27)
Yo digo que es admirable la paciencia de Dios para con el hombre, porque aun hoy puedo ver que se desdeña al Señor. Algunos promueven la idea de que el único mérito del Señor fue su aporte a la moral y luego de otorgarle ese único mérito, se lo arrebatan diciendo que como maestro de la moral, Cristo fracasó por mentir al afirmar ser Dios.

El poder de Cristo es algo tangible aún en el día de hoy. El Rey del universo y de los elementos tiene hoy y siempre poder sobre todo. Hoy Él sigue en control.

Dios ahora mismo me permite compartir con el mundo el siguiente testimonio: Una noche mi madre, mi hermano y yo veíamos las noticias del canal 11 en República Dominicana, con la conducción del periodista Roberto Cabada. Este reportaba que científicos pronosticaban altas posibilidades de que en Santiago de los Caballeros, Rep. Dom. podía ocurrir un gran terremoto.

El Espíritu puso en mi mente una palabra que me martillaba diciendo: ¡Declara ese augurio como falso. Confieso que no quería hacerlo, y puse señales a Dios de las que suelo ponerle, y la señal me indicaba: ¡Obedece a la idea que no es tuya, proviene de Dios. Este es el detalle con nosotros, queremos ser instrumentos en las manos de Dios; pero luego a la hora de la verdad nos amedrentamos. Si hay algo de lo que me he cuidado en estos 22 años es de no hablar en nombre de Jehová por emoción sin que realmente Dios esté en el asunto.

Eventualmente le digo a mi madre y a mi hermano:
"Dios pone en mi corazón decir que esa declaración no se cumplirá, y si me regalaran una casa en Santiago, yo la aceptaría y viviría en ella."
Con esas palabras declaré nulo el augurio de mal contra Santiago. Esa misma noche soñé que se había producido un terrible terremoto y pude ver una hilera de estatuas y de ídolos rotos y derribados a todo lo largo de las calles. Una fila interminable de estatuas destruídas. Al amanecer, el Espíritu pone en mi corazón que cuente el sueño a mi madre y a mi hermano, pero esta vez respondí con la primera confirmación de Dios. Esa misma mañana escuchamos en una emisora cristiana que en Japón se había producido un terrible terremoto.

Yo personalmente no tengo duda del significado de todo esto. Posteriormente publique en este blog que los desastres naturales son corrección divina. En Mateo 28:18 dice: "Toda potestad me es dada en el cielo y la tierra". 

Jesús no fue un filósofo más; Jesús es Dios.

No hay comentarios:

Publicar un comentario