NEUTRALIZACIÓN DE LA MALDICIÓN

Santo Domingo, República Dominicana. 19/abril/2012

Maldito por Dios es el colgado...<Deuteronomio 21:23>. El concepto que ahora expongo no lo he escuchado nunca antes entre mis hermanos, pero ustedes ya deben conocerme que esto no me ha detenido antes. No digo con esto que nadie lo haya expuesto, lo que digo es que no lo he oído de nadie. 

La maldición es una sentencia perniciosa proferida por alguien para que surta efecto sobre su destinatario. Dios profierió miles de bendiciones que surtirán efecto sobre los hijos de obediencia, pero también maldiciones que serán efectivas sobre los hijos de desobediencia. Dios bendice y maldice, pero también el hombre lo hace. Cuando el hombre bendice al otro hombre, Dios dice amén y secunda la bendiciónl, pero cuando el hombre maldice a otro hombre Dios no lo secunda, pero la maldición caerá dependiendo de la condición del destinatario.

El hombre santificado, lavado por la sangre de Cristo no recibe maldición ya que Dios neutraliza el efecto de la maldición y en otros casos  invierte el efecto de estas. 

Satanas sin duda maldijo miles de veces a Job sin que sus maldiciones suertieran efecto. Pero luego Dios no le permitió maldecirlo sino perseguirlo que no es lo mismo. 

Lo que entra en contacto con el Espíritu Santo de Dios se santifica o se consume. Y es mejor santificarse que consumirse, que ser consumido por la gloria de Dios. Cuando el hombre era tocado por una mujer menstruosa quedaba inmundo, Cristo fue tocado por la mujer del flujo de sangre y en vez de Él quedar inmundo, ella quedó sana. Hoy la mujer con su costumbre que ponga la mano sobre tu hombro se santifica y no te hace a ti inmundo. 

El error que se está cometiendo constantemente en las interpretaciones es que se está catalogando la persecución al creyente como una maldición, pero Jesús dijo: <Bienaventuerado los que por la justicia que hacen son perseguidos {Mateo 5:10}>. La bienaventuranza dicha por Jesús en el Sermón del Monte tiene un efecto retroáctivo sobre Job al padecer persecución por ser justo. 

¡Ya basta¡ Porque Dios conoce el fondo del asunto. Y el fondo del asunto es querer justificar la adoración a mamón.