REPRESENTACIONES(1)

Santo Domingo, República Dominicana. 8/abril/2012


INTRODUCCIÓN

Una vez escuché a alguien decir: "La lengua y los dientes siempre han estado juntos y a veces los dientes muerden la lengua. La idea que esta persona quiso expresar es que es normal entre los seres humanos el conflicto y que ni aún los cristianos se exceptúan para tener estos conflictos. Hasta este punto estoy de acuerdo y comparto el razonamiento, pero no comparto la actitud de aceptación de esta situación, por lo que propongo que se juzguen situaciones irreales. La ventaja de juzgar situaciones irreales son incalculables, entre ellas no se corre el riesgo de la parcialización  porque estaríamos juzgando a seres irreales, no conocidos por nosotros. Se razonaría con completa libertad en sujeción a los criterios de justicia , misericordia, y fe. Estos juicios se archivarían con los nombres de las personas participantes indicando su acuerdo o desacuerdo en la sentencia emitida por la mayoría. 

• En esto conocerán todos que ustedes son mis discípulos: si hay amor entre ustedes. (Juan 13:35)
• No hagáis distinción de persona en el juicio; así al pequeño como al grande oiréis, no tendréis temor de ninguno porque el juicio es de Dios (Deuteronomio 1:17)

El amor se enfría al multiplicarse la maldad y las malas relaciones humanas, las torpes y descuidadas  son un tipo de maldad que enfría el amor dentro de la iglesia de Jesucristo. 

No. 1   LA MURMURACIÓN

María le dice a Rebeca: ¿Viste que faldita trajo Celeste?

La palabra murmuración es definida por el diccionario de la siguiente manera: " Conversación en perjuicio de un ausente. (Espasa 2000)" Esta definición es precisa. Aquí no nos dice que lo que se diga en perjuicio del ausente debe ser falso o verdadero, para que haya murmuración basta con que lo que se diga, se hable o simplemente se comente sea en perjuicio de la persona ausente, sea falso o cierto, es murmuración. En el caso anterior, María murmuró a Celeste. Una sola palabra en perjuicio del ausente es murmuración, sea la palabra unívoca o ambigua. Cuando la murmuración es falsa también es calumnia o falso testimonio.

No. 2  EL CHISME

María le dice a Rebeca: ¿Viste qué faldita trajo Celeste?. Rebeca entonces va y cuenta a Celeste el comentario que María hizo de ella. 

La palabra chisme es definida por el diccionario de la siguiente manera: " Noticia verdadera o falsa, o comentario con que generalmente se pretende indisponer a unas personas contra otras." En el libro de Proverbios 6:17 dice que Jehová aborrece o abomina al que siembra discordia entre hermanos. Esta es la función del chismoso, echar leña al fuego de la discordia. En este caso María es culpable de murmuración y Rebeca de chismosa.

No. 3  LA DENUNCIA RELIGIOSA 

La denuncia religiosa parece un chisme pero no lo es. El chisme procura indisponer a dos o más personas con la finalidad de hacerlas pelear o discutir o enemistarse, sin embargo la denuncia religiosa procura salva-guardar la moral de la iglesia o del grupo, la moral de la iglesia en conjunto. 

No hay nada oculto que no haya de saberse. Esto para un cristiano es una ley más certera que la ley de la gravedad (la que dice que lo que se deja caer libremente es para abajo que va), igualmente, no hay nada oculto que no haya de saberse.

He aquí nuestro caso ficticio: Acab es un diácono de la iglesia. Por la ley de inocultabilidad Dios pone al hermano Adrés en el lugar y hora precisos en el que descubre que el diácono Acab ha cometido un pecado. No especificaremos. Puede ser: robo, fornicación, etc., Andrés lo denuncia ante otro diácono para que se proceda ordenadamente en este asunto. Es la palabra del diácono contra la de un simple miembro.

En caso de que el diácono se niegue, se les informa que ambos quedarán en las manos de Dios para que sea Dios quien reprenda a quien miente. La iglesia orará a Dios para que Jehová castigue al mentiroso quien a todas luces no tiene temor de caer en las manos de Dios. 

En el supuesto de que sea cierto lo de Acab, Andrés no ha incurrido en chisme, sino que ha hecho una denuncia religiosa ante  los líderes de su congregación. De no denunciar es cómplice por inacción. Así se distingue la denuncia religiosa del chisme. 

Es utópico pensar que el no creyente se someta a esto que propongo. Esto se escribe pensando exclusivamente en las relaciones personales entre creyentes.