LOS DOS TESTIGOS

Santo Domingo, República Dominicana. 26/mar/2012

Para los que están armando el rompe cabeza conmigo. Para los que están conmigo poniendo todas estas piezas barajadas en su correcto lugar, he aquí otra pieza. Si has venido poniendo las piezas en el orden que hemos venido indicando, entenderás que la abominación desoladora es la señal de la gran tribulación, pero otra señal la cual indica que el fin está muy cerca es el ministerio de los dos profetas vestidos de cilicio, ya que el final o término del ministerio de estos dos profetas lo marca el surgimiento de la bestia, quien los asesinará. (Apocalipsis 11:7). 

Estos profetas le mostrarán al pueblo de Dios que no hay comunión entre la luz y las tinieblas. Todos y sin excepción, de aquellos que aman el mundo y las posesiones del mundo odiarán a estos dos profetas quienes serán un atentado al "progreso". El poder que manifestarán no será ruido, sino verdadero poder y trastornarán al mundo. No les importará que los llamen santurrones ni retrógrados, pues no son de este mundo, como no es de este mundo ningún cristiano genuino.

Así que cronológicamente primero van los dos testigos, luego la abominación desoladora, y luego la gran tribulación. Para mí es sorprendente saber que muchos se perderán aún viendo estos acontecimientos, profetizados miles de años antes de que lleguen a suceder. Gloria a Dios todo Poderoso por la salvación que nos ha dado. Estas son las características de los dos testigos:

1. Profetizarán por mil doscientos sesenta días, vestidos de cilicio. 3.5 años.
2. Son los dos olivos. (Ungidos)
3. Candeleros. (Hombres de oración y santidad)
4. Literalmente quienes atenten contra sus vidas morirán al ser malditos por ellos.
5. El daño que se atente contra ellos se vuelve a la persona que hace el atentado.
6. Cerrarán el cielo para que no llueva.
7. Convertirán el agua en sangre. 
8. A discreción herirán la tierra con diversas plagas.