Santo Domingo, República Dominicana. 10-Junio-2012
Muchos han pensado aceptar a Jesús y luego han retrocedido cuando el enemigo les dice en sus mentes: ¿De qué vas a vivir si aceptas a Jesús? Cuando yo he experimentado personalmente una situación puedo hablar de ella con toda propiedad, y tengo que decir ahora que no experimenté personalmente como sería tener que renunciar a un modo de vida ilícito por la causa de Jesús, porque cuando acepté a Jesús yo ya estaba en banca rota y desempleado. Pero puedo decir que aún sin ser cristiano confeso rechacé toda oferta de lo ilícito y preferí vender jugos en la Duarte, recoger botellas para venderlas y hasta mendigar entre mis amigos.
A los que ya tienen un modo de sustento ilícito y no han aceptado a Jesús y quisieran hacerlo, no tengo otra palabra que darles sino que aquella dada por Jesús:
Así que mi palabra es que aceptes a Jesús y en el camino Dios te cambiará, por tu sinceridad, el modo ilícito de subsistencia por uno lícito, porque para Dios no hay imposibles."Lo que para el hombre es imposible, para Dios es posible..."
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