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viernes, 11 de enero de 2013

USO ATINADO DE LA PALABRA

Santo Domingo, República Dominicana. 11-Enero-2013

Érase una vez un hombre que se identificaba como cristiano, pero tomaba prestado y no pagaba, cometía fornicación ocultamente, y quién sabe cuantos pecados más tenía ocultos. Cuando la palabra cortante del Señor, que penetra hasta los tuétanos de los huesos lo destrozaba, de inmediato decía:
  • El diablo también sabe Biblia. O,
  • ¿Por qué sacas la paja del ojo de tu hermano, cuando tienes un tronco en el tuyo?
No quiero caer en la generalización, pero cuando escucho a la gente utilizar, o a cristianos utilizar a Mateo 7:5 sin justificar por qué lo cita, eso me da mala espina, pues me parece que la persona que lo hace, es porque sangra por la herida, porque se le ha lastimado alguna llaga. El cristiano está llamado a usar bien la palabra de verdad. (2da Timoteo 2:15). Un cristiano serio, evita al máximo la ambigüedad y el error y no utiliza la palabra de Dios fuera de contexto como es costumbre de los hombres del mundo que viven engañando y siendo engañados, y justificandose ellos mismos.
¿Cuál es el contexto de Mateo 7:5? Daré un ejemplo: Un padre que use una droga ilegal y le prohiba a su hijo que no fume cigarrillos. El cigarrillo es la paja en el ojo, y la droga ilegal es el tronco en el ojo del padre. Cristo le llama a esto hipocresía, y le aconseja al padre que primero deje su mal hábito para luego tener calidad moral para aconsejar al hijo. En Mateo 7:1 dice: ¡No juzguéis para que no seáis juzgados! ¿Se debe interpretar esto de manera absoluta? ¿No reinaría el caos en el pueblo de Dios donde todo el mundo haría  cuanto le parezca sin encontrar quien le censure? ¡Seamos niños en la malicia, no al razonar! El siervo de Dios está obligado a juzgar las cosas espirituales, así está escrito. No está llamado para hacer juicio condenatorio, lo cual pertenece a Dios, sino a juzgar para establecer lo justo en oposición a lo injusto, del pecado en oposición a lo que no es pecado.
Tener calidad moral no significa ser igual a Jesús, sino tener buen testimonio. Por lo tanto, quien tiene buen testimonio tiene calidad moral para juzgar las cosas espirituales.
El pseudo-cristiano acecha y vigila al cristiano verdadero con testimonio si le reprende su error, para descalificar retroactivamente a este verdadero cristiano que lo reprendió, en caso de que este verdadero cristiano cometa un error. Y su propósito no es restaurar como lo procura el verdadero cristiano, sino acusar, lo cual es el oficio favorito del diablo.

¡Se sabio! Yo con mis palabras a nadie acuso, porque a nadie me dirijo personalmente. Y si llegara a dirigirme personalmente a alguien es para que abandone su mal camino, esto lo haría si tengo calidad moral para hacerlo. Es un error interpretar esto como jucio condenatorio, el cual es el prohibido.

¿Qué es un jucio condenatorio? Este es un ejemplo:
Don X, permitame decirle que usted se irá al infierno porque usted es un borracho, y claramente la Biblia dice que los borrachos no heredarán el reino de Dios.
Así qu el jucio condenatorio y el jucio sin calidad moral son los juicios prohibidos al cristiano. Pero el justo justo juicio con calidad moral es algo a lo que el cristiano está obligado. Para enseñar al pueblo y al mundo a hacer diferencia entre lo santo y lo profano.

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